¿Qué debe tener una comida completa?

Plato de comida saludable

Para alcanzar o mantener un peso saludable, la cantidad de comida es tan importante como lo que se come. ¿Sabe qué cantidad de comida es suficiente para usted? ¿Conoce la diferencia entre una porción y una ración? La siguiente información explica las porciones y las raciones, y ofrece consejos para ayudarle a comer lo suficiente.

Una ración es la cantidad de comida que decides comer de una vez, ya sea en un restaurante, de un paquete o en casa. Una ración, o tamaño de ración, es la cantidad de alimento que aparece en la etiqueta de información nutricional de un producto, o en la etiqueta de los alimentos (véase la figura 1).

Cada producto tiene un tamaño de ración diferente. Los tamaños pueden medirse en tazas, onzas, gramos, trozos, rodajas o números, como tres galletas. Dependiendo de la cantidad que decidas comer, el tamaño de tu ración puede o no coincidir con el tamaño de la porción.

Para saber cuántas raciones tiene un envase, mira en la parte superior de la etiqueta. «Raciones por envase» aparece justo encima de «Tamaño de la ración». En el siguiente ejemplo, el tamaño de la porción de una lasaña congelada es de 1 taza. Pero el envase tiene cuatro porciones. Si quieres comer 2 tazas -o la mitad del envase- estarías comiendo dos porciones.

Dieta equilibrada

Estudiar algunos ejemplos puede facilitar todo esto de la planificación de las comidas, así que aquí tienes una semana completa. No es necesario que sigas los días en orden; puedes elegir cualquier plan de comidas, saltarte uno o repetirlo como quieras.

El plan de comidas de esta semana ha sido diseñado para una persona que necesita entre 2.100 y 2.200 calorías al día y no tiene ninguna restricción dietética. Su objetivo calórico diario puede variar. Conozca cuál es a continuación, y luego modifique el plan para adaptarlo a sus necesidades específicas.

Siéntase libre de añadir más agua, café o té de hierbas a cualquier día, pero tenga en cuenta que añadir crema o azúcar también añade calorías. No hay problema en intercambiar elementos del menú similares, pero tenga en cuenta los métodos de cocción.

Sustituir un solomillo por pollo a la parrilla está bien, por ejemplo, pero sustituirlo por un filete de pollo frito no va a funcionar porque el empanado cambia el recuento de grasas, carbohidratos y sodio, y las calorías. Por último, puede ajustar su consumo de calorías eliminando los tentempiés si quiere perder peso o comiendo tentempiés más grandes si quiere ganar peso.

Qué comer cada día

Pero esto no es todo. Todos tenemos un equilibrio individual que depende de la forma en que nuestro cuerpo se indica a sí mismo que debe procesar los alimentos. Algunas personas queman más energía y de forma diferente, y esto explica parte de la diversidad de nuestro aspecto.

Las directrices recomiendan que los hidratos de carbono («carbohidratos») formen la base de la mayoría de las dietas, constituyendo la mitad de la ingesta total de energía (calorías). Este grupo de alimentos puede separarse en carbohidratos complejos (buenos) y simples (malos).

Los carbohidratos complejos (harina y pasta integrales, y arroz integral) contienen cadenas más grandes de moléculas de azúcar. Tardan más en ser digeridos que los cereales procesados. Esto hace que te sientas lleno durante más tiempo, ayudando a controlar tu apetito.

Los carbohidratos complejos refinados (harina blanca, pasta y arroz) son digeridos más rápidamente por el cuerpo. Esto los convierte en una fuente de energía más rápida. Sin embargo, estos tipos de carbohidratos no ofrecen tantos nutrientes adicionales. Por eso, los carbohidratos integrales y los marrones ayudan a mejorar la calidad general de la dieta.

La fruta y la verdura son alimentos ricos en carbohidratos. Incluyen una amplia gama de vitaminas y minerales, así como fibra soluble. El objetivo de comer cinco raciones de fruta y verdura al día es bueno para la salud.

Qué es una comida completa

Un consejo nutricional muy común en todo el mundo es «llevar una dieta equilibrada». Esto parece una idea bastante fácil hoy en día, donde palabras como «carbohidratos», «fibra», «fructosa» y «ácidos grasos omega-3» se abren paso en la conversación cotidiana. En las últimas décadas, la investigación científica ha ampliado rápidamente el conocimiento de la nutrición humana, pero esto puede hacer que una dieta saludable parezca mucho más complicada de lo que solía ser. ¿Cómo podemos asegurarnos de obtener una cantidad suficiente -pero no excesiva- de la aparentemente interminable cantidad de nutrientes que existen?

La buena noticia es que es bastante sencillo. Una comida equilibrada es un resumen de una dieta que cubre los tres grupos de alimentos principales. Como se ve en este plato de raciones, el equilibrio es un cuarto de proteínas, un cuarto de carbohidratos y la mitad de verduras1.

Hay seis tipos de nutrientes esenciales para la supervivencia: proteínas, hidratos de carbono, lípidos (grasas), vitaminas, minerales y agua. Las proteínas, los hidratos de carbono y las grasas son macronutrientes, «macro» significa que los necesitamos en grandes cantidades. Proporcionan energía al cuerpo, medida en kilojulios o kilocalorías2. Las vitaminas y los minerales se clasifican como micronutrientes porque sólo se necesitan en pequeñas cantidades. El agua también es un macronutriente esencial, ya que el volumen producido por el cuerpo a través de los procesos metabólicos es muy inferior a la cantidad que perdemos cada día a través de la transpiración, la orina, las heces y la respiración.